Servus, responsables ciudadanos.
Como evangelista del ateísmo tengo la responsabilidad de echar por tierra todo argumento que intente probar la existencia de Dios. Creer en un dios, sobre todo en uno del modelo judeo-cristiano, me parece algo completamente irracional, algo que ya no es adecuado para esta época. Sin embargo, respeto la libertad de toda persona de creer en lo que se le de la gana.
El problema con esto surge solamente cuando el creyente afirma tener una verdad absoluta, puesto que al hacer esto él mismo se somete a ser cuestionado y criticado, algo que me parece totalmente razonable. No obstante, al creer que tiene la verdad absoulta a la mano, el creyente rechazará toda crítica, generalmente causando un conflicto.
Es por eso que más que destruir la creencia en Dios, mi misión con este blog cutre es hacerles entender a los creyentes que nadie está obligado a creer lo que dicen...
Dejando esto en claro, vayamos al tema...
El día de hoy fui interceptado una vez más por un hombre que intentaba convencerme de aceptar a Jesús en mi corazón y así alcanzar la salvación. De otra manera, me advirtió seriamente, sufriría en el infierno por toda la eternidad.
Me contuve, respiré hondo y conté hasta diez.
Le dije que si no existía la más mínima evidencia para creer en Dios, mucho menos en el infierno. Y fue ahí cuando ví que sus ojos brillaron, como si hubiese estado esperando esa respuesta.
Me dijo: "Oh, pero si Dios sí existe, puedo probártelo." Acto seguido, procedió a contarme una de las tantas versiones del argumento teleológico, también conocido como el "argumento de diseño." Concretamente, el wey este se refería a la corriente del Diseño Inteligente (de aquí en adelante, DI).
Básicamente, lo que el argumento teleológico propone es que considerando lo complejo que es el universo, es lógico deducir que fue creado por un ser inteligente y, por supuesto, todopoderoso. El DI afirma que ciertas características de los seres vivos y del universo en general se pueden explicar por el hecho de que fueron diseñadas por un tipo de inteligencia. Los que quieren pasar por más científicos aceptan que la evolución es un hecho, pero añaden que es guiada (diseñada) por una inteligencia, y no por el proceso darwinista de selección natural.
Aunque muchos creyentes todavía recurren a este tipo de sofismas, la verdad es que el argumento teolológico y el DI no son tomados en serio en biología, cosmología, filosofía o cualquier otra disciplina. Han sido invalidados una y otra vez desde que fueron propuestos.
Veamos por qué...
Primeramente, aunque el argumento probara la existencia de un creador, no prueba la existencia de Dios. El creador o diseñador de nuestro universo podrían ser varios dioses, una raza extraterrestre o el Monstruo de Espagueti Volador.
Segundo, complejidad no implica diseño. Esta es una falacia non sequitur del argumento, pues infiere la existencia de un diseño inteligente con simplemente analizar un objeto. Además, se han observado sistemas complejos que se "ordenan" por procesos naturales bien conocidos, como los copos de nieve.
Tercero, el argumento también cae en una regresión infinita (como muchos otros). Si existe un "diseñador" del universo, el argumento teolológico también se le aplicaría a él. El diseñador debe ser por lo menos tan complejo como el objeto diseñado, y si algo es complejo, necesita un diseñador, quien a su vez es algo complejo, por lo que necesita un diseñador, etc...
Cuarto, (aunque no me quiero meter mucho en esto), está el argumento de "mal diseño": si existe un diseñador, ¿por qué hay errores como el sistema reproductivo humano, los nervios de la langosta africana, las diferentes enfermedades y, en general, la hostilidad que reina en un universo lleno de polvo, gas, hielo y espacio vacío? Más que un DI, todo esto parece indicar que la razón son procesos naturales.
Ah... podría pasar todo el día destruyendo este argumento pero por ahora me voy a la cama... si es que consigo dormir. ¿Por qué no podemos auto-inducirnos el sueño? Mal diseño...
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